Paros

Paros es una joya incrustada en el corazón de las Cícladas. Una de esas islas que, con sus calles blancas, el intenso azul del mar y la autenticidad del paisaje, logra cautivar de inmediato a quienes la visitan. La atmósfera que se respira es particular, una magia rara y completamente mediterránea.

Paseando por las estrechas calles de Naoussa - un pintoresco y vibrante pueblo de pescadores - parece casi escuchar el murmullo de las historias que la isla ha contado durante generaciones. Poco más allá, el silencio de la capital Parikia (que cuenta con una historia milenaria) invita a ritmos lentos, a respirar hondo. Y qué decir de Lefkes, situado entre suaves colinas interiores? Vale la pena admirar la belleza de sus paisajes, casi sacados de una postal. Las playas, con su arena fina y aguas cristalinas, son una parada especialmente recomendada para vivir momentos de relajación absoluta, sumergidos en la naturaleza virgen.

¿Cómo se llega a este paraíso cicládico? Las conexiones con el resto de Grecia son sencillas y eficientes. Se puede elegir un vuelo directo desde Atenas (opción cómoda y rápida) o los ferris desde El Pireo y otras islas de las Cícladas. Y una vez en la isla - pequeño consejo práctico - alquilar un coche o un scooter es la solución ideal para moverse con facilidad entre los diversos pueblos y las playas más bellas.

La cocina local aquí es una fiesta de sabores mediterráneos simples y genuinos, celebrados con esmero en las tabernas tradicionales que se encuentran por todas partes. Pescado recién capturado, ingredientes frescos y una atmósfera auténtica hacen de cada comida una experiencia memorable. Una cena al atardecer frente al mar: ¿hay algo mejor?

Profundiza en los artículos de The Wom Travel dedicados a Grecia y déjate inspirar por el alma irresistible de Paros. Es realmente el momento de planificar tu próxima aventura.